¿Guardar el dinero en casa?
En nuestro país todavía es común encontrar personas que eligen guardar todos sus ahorros en casa, tal como lo hacían sus padres y abuelos. Pero esta costumbre no es la mejor, sobre todo ahora que las entidades financieras ofrecen diferentes alternativas según las preferencias del cliente. Es recomendable tener un poco en casa para cualquier eventualidad, pero el grueso en una entidad financiera.
¿Por qué no guardar el dinero en casa?
La razón principal es porque te expones a robos y pérdidas debido a posibles atentados, sismos, inundaciones u otros. La constante preocupación de resguardar tu dinero, te da una sensación de intranquilidad. El hecho de tener los ahorros en casa implica no tener que solicitarlos al banco y por tanto su disponibilidad es más inmediata… Tener el dinero a tu disposición para gastarlo, hace más difícil ahorrar.
Asbanc, la Asociación de Bancos del Perú, recomienda guardar el dinero en una entidad financiera, ya que tener tu dinero resguardado evita que seas víctima de un robo, de atentados o desastres naturales. De igual manera, cuentas con un Fondo de Seguro de Depósitos que cubre tus ahorros hasta un monto de S/97,586 por cuenta. Esto significa que en el caso hipotético de que una entidad financiera quebrara, este seguro hace frente a la deuda que la entidad tiene con los clientes y les devuelve el dinero depositado.
¿Alguna vez has pedido un crédito?
Es importante saber que las entidades financieras evalúan tu flujo de ingresos a partir de los depósitos que registra tu cuenta y tus ahorros pueden influenciar en la tasa de interés de un préstamo.
Otra ventaja de tener el dinero en una entidad financiera, es atenuar los efectos de la inflación A través de una entidad financiera puedes obtener un retorno de hasta 8% aproximadamente, para un depósito a plazo fijo.
Debes considerar que así, es posible conseguir beneficios con el dinero que no se utiliza y sin correr riesgos. Los depósitos son una opción rentable para quien posea un capital y no tenga necesidad de utilizarlo a corto plazo. Consulta con tu entidad financiera cuáles son tus opciones.